Coctel

Pequeños destellos de luz caminando por la cetrina textura de durazno de la piel, el almizcle que acaricia el olfato y el sonido suave que es la anhelante voz en busca de un contacto febril; dos cuerpos que se mezclan en un coctel que embriaga y posiciona a la mente como simple espectadora de esta maravillosa escenificación; la tersura de un cuerpo formando remolinos avasalladores mientras los latidos del corazón se aceleran esperando sean ciertas las promesas de un lugar mejor en los brazos de una tierna amante.

Los rezos no escuchados por tanto tiempo se pierden en la orquesta de besos, caricias e incontables suspiros de los amantes; son uno y ninguno, creando una figura multiforme de extrema belleza, intercambiando almas a cada contacto, creando un lazo que los unirá por siempre.

De pronto el frenesí, un viaje a traves de espacios imposibles para ningun dios; y es asi que su venganza es el silencio, la calma absoluta, la muerte,-morir de esta manera... que afortunados- de pronto la voz regresa, la conciencia también convirtiendote asi en el espectador de un juego, uno magnifico e irrepetible que empezó en el mismo lugar que termina, con una dulce voz en el oído de tu tierna amante.