miércoles, 11 de marzo de 2009

Los ojos del retrato

La imagen del aquel retrato, cambio mi vida por siempre, divina, ancestral, la imagen de aquella mujer, de rostro hermoso y quijada fuerte, parecía helar mucho mas que mi alma eterna, tan inaudita suena esta descripción, así como la acción que siguió al momento de adentrarme en su mirar, quede pasmado, y así deje pasar el tiempo, me parecieron algunos escasos segundos, así que me despreocupe del mundo. Cuando sus ojos se apagaron, como intentando descansar su hechizo sobre mi, caí en la cuenta de mi estado, el dolor en mis articulaciones denotaba algo mas que segundos, como yo hubiera jurado, en la misma postura hipnotizado por esos ojos, tarde al menos 40 minutos en recuperar la movilidad, y entonces me dirigí al espejo contiguo a la imagen de mi captora, mi estado no era ni cercano a lo que imagine; mi rostro lleno de vida, una sonrisa que no adquiría desde la niñez, un brillo en los ojos cual si hubiera nacido de nuevo, mi piel expelía un aroma delicioso que no era el mío aunque no me percate de ello en ese momento, solamente mi cabello parecía quererme decir la verdad, su crecimiento me daba al menos la idea de 2 años en la misma postura, todo ese tiempo dejando que sus pupilas escarbaran los rincones mas inhóspitos de mi espíritu, rincones que yo mismo nunca visitaba, haciéndome sentir violentado; pero el saberme libre al fin me hizo alejarme de ese lugar, sin notar que dejaba algo mas que el tiempo tras de mi a cada paso que daba.

Mis sentidos se aguzaron dándome un amplio espectro del mundo, me dirigí rápidamente a todos mis lugares conocidos, con gente que nunca trate pero estaban grabados en la memoria; algunos cambiaron, otros parecían mantenerse como recuerdos borrosos, mirados a través de una ventana sucia, lugares y espíritus sin alma que repetían incesantemente su devenir, que estuvieron allí hace dos años y que estarán también en los siguientes mil; incapaces de morir, de cambiar, existir; en ese recorrido confirme la teoria de 2 años en cautiverio. No deje de caminar sin rumbo por la ciudad, mis pasos acompasados determinaban el ritmo de mi pulso cardiaco, cuando al fin me detuve, mi alma siguió caminando; 3, 5 pasos mas que yo, 7 pasos y a los 9 me derrumbe sin estrepito, como un edificio en ruinas que permanece en su lugar antes de desmoronarse comencé a morir, desvaneciéndome poco a poco a mitad de una calle llena de nada; fue en este momento que me di cuenta que tenia que correr a recuperar el alma, y supe que el tiempo perdido no iba a regresar, corrí tras mi ser esencial, pero este corría siempre los 9 pasos que deje me aventajara, me convertí en una sombra de mi. Al cabo de los días me acostumbre a este juego extraño en que yo dependía de lo que hiciera ese espíritu; pero después de una semana su andar errático provoco en mi una ira incontenible, había regresado a mi casa, y todas las mañanas, a las 5 de la mañana para ser exactos nos guiaba a la puerta principal, revisaba la aldaba siempre el mismo numero de veces y comenzaba su rutina, Un deambular perpetuo en busca de nada.

Aun recuerdo ese 17 de enero en que descubrí la solución, tenia que dejar pistas por adelantado para que las siguiera mi alma, pero, si iba delante de mi ¿cómo podía hacerlo?; siendo aun mi mente parte del cuerpo y no del alma, comencé a maquinar mi plan. El primer día al pasar por una de esas calles llenas de espíritus y preguntándome si acaso ellos padecían el mismo mal que yo, en una destartalada estantería observe un folleto el cual tome sacrificando así un paso mas, haciendo el caminar tanto de mi cuerpo como de mi alma mucho mas pesados; el maltratado panfleto, era una guía de las leyendas de la ciudad, el cual aventure mi alma querría leer al menos por curiosidad; y así fue que encontré una casa que mi memoria parecía recordar de algún lado, trayendo así el nombre de una calle. En los días siguientes, planee en como llevarnos a esa calle y hacernos recorrerla toda; fue así que llame a una agencia de paseos turísticos e hice una reservación, específicamente para las leyendas importantes, esto me costo 2 pasos mas quitándonos a ambos un poco mas de esta extraña existencia; ahora sabia que estábamos muriendo aunque no sabia cuantos pasos mas nos quedaban.

El día del paseo, mi cuerpo subió a un destartalado autobús con una chica que hablaba a través de un altavoz, el cual por cierto seguramente no servía, pues no se entendía palabra alguna; y como cada vez que lo intente con transportes normales tratando de alcanzar mi alma, aparecía este espectral vehículo que servía solo para mantenernos separados los hasta ahora 12 pasos. Observe con cuidado cada casa hasta que por fin se alzo ante mis ojos, la visión mas anhelada de un modo que no espere, mi alma entonces pareció reaccionar antes incluso de lo que espere para 12 pasos y me di cuenta que era el momento; me baje del autobús, atropelladamente haciendo caso omiso a la chica del altavoz, la cual en su afán de cumplir su deber, me robo 1 paso mas dejando una débil hebra de conexión entre mi ser metafísico y el físico, fue así que llegue arrastrándome, al igual que mi otro yo a una pequeña casa abandonada, sin puerta por la cual accedí; atravesé un pequeño corredor hasta una escaleras, sintiendo que la conexión se rompía, viendo con dificultad, sin poder respirar y a un paso de la inconsciencia, subí por estas, y a la mitad en un descanso observe a mi alma detenerse, me esperaba, viendo una imagen divina, ancestral de una mujer de rostro hermoso y quijada fuerte, llegué hasta él y nos volvimos uno de nuevo, de pie, observando esta imagen que recordándome encendió sus hipnóticos ojos de los cuales no me librare jamás.

2 comentarios:

Br3n dijo...

solo puedo decir que de verdad la amas!!

magda :) dijo...

Corpus mi amor esta muee muee bueno tú cada vesz me sorprendes mas :)