viernes, 27 de febrero de 2009

El gato


Noche tras noche despierto, al punto más alto de la oscuridad, una que me devora completamente privándome de cualquier rastro de luz, dejando mi cuerpo desnudo flotando en la nada, sin vaivén sin aire, tan libre y a la vez tan preso del nocturno solitario, aislándome del mundo, de mi, de tu recuerdo.

Caigo en cuenta de tu ausencia al percatarme de una presencia oculta tras las ventanas de mi habitación, oculto vigilante, ágil y soberbio felino con sus titilantes ojos abre una brecha en mi alma, con sus garras me destroza la mente y su maullido es el grito que ahogo cada día, capaz de enloquecer a cualquiera, pero este visitante asiduo a mi cubil me cuida y brinda un día mas de vida, de cordura, dándome un halo de tranquilidad nocturna; esperando encontrarnos cada noche al punto mas alto de la oscuridad, esperando la ausencia de tu ausencia.

1 comentario:

Br3n dijo...

Wow !!! Momo que inspirado, se nota puro amorr